Robert David Steele es asesor principal de la Comisión Judicial de Investigación sobre Trata de Personas y Abuso Sexual Infantil, ex oficial de la Marina, ex miembro de la CIA y candidato al Premio Nobel de la Paz en 2017.
La Comisión Judicial fue instituida por el Tribunal Internacional por la Justicia Natural, un organismo fundado en febrero de 2015 y asentado en Londres (Inglaterra).
Según el investigador, “miles de niños son secuestrados, abusados, asesinados y sacrificados al diablo por razones de poder. Lo dicen las víctimas, los testigos y las pruebas”. Sostiene que lo conocido hasta ahora muestra el verdadero vínculo entre el poder, la pedofilia y el satanismo, cuya pieza central está oculta en los centros de poder estadounidenses y en todo el mundo.
Steele trabajó para la CIA en la oficina de Operaciones Clandestinas desde 1979 hasta 1988, y descubrió el alcance total de la pedofilia cuando estalló el famoso escándalo «PizzaGate». Profundizó este descubrimiento con su apoyo al libro Pedophilia & Empire: Satan, Sodomy, & the Deep State” [Pedofilia e Imperio: satanás, sodomía y el Estado Profundo).
A su criterio, después de años de investigaciones, está convencido que la pedofilia es la manera en la que el Estado Profundo atrae personajes clave y mantiene el poder. Sostiene que alrededor de ocho millones de niños al año son “reclutados” en todo el mundo, con una expectativa de vida para un niño maltratado de aproximadamente dos años. La mayoría de los que desaparecen terminan en las redes de pedofilia, para luego ser torturados y finalmente asesinados, de modo que su sangre sea bebida y sus órganos comidos, como surgió de los testimonios recogidos por la Comisión Judicial y que se pueden ver en su página oficial.
Hay recopilados testimonios de algunas víctimas que hablan de este vínculo entre pedofilia y satanismo, aunque la mayor parte de las informaciones proviene de fuentes secundarias.
La pedofilia también está estrechamente asociada con la sodomía, que es un aspecto particular de la masonería y las sociedades secretas. La perversión parece ser considerada un privilegio vinculado al rango e incluye el llamado Abuso de Rito Satánico. A su entender, el Estado Profundo es absolutamente satánico, luciferino y está vinculado a la sinagoga de satanás.
El experto describe las tres formas de proveniencia de los niños. El más básico es el crecimiento de los niños como cultivo rentable, vendidos sin que sean registrados al nacer. El segundo son los niños reclutados del flujo migratorio. El tercero son los niños a pedido, que se dividen en hijos de padres degenerados que los venden por hora a pedófilos y los niños secuestrados después de ser seleccionados de los catálogos: entre los niños más costosos están aquellos que son secuestrados de familias «perfectas» en todo el mundo, que no tienen idea de que sus hijos fueron fotografiados, puestos en el catálogo y luego vendidos.
La Pedofilia más allá de la ley
La pedofilia está más allá del control policial, incluyendo Scotland Yard y la Gendarmería de todos los países, porque es un privilegio de los nobles, de los partidos en el poder, de los multimillonarios y las celebridades. Es una forma de cocaína, también porque además de la excitación derivada del abuso de un niño impunemente, también está el adrenocromo, la sangre empapada en adrenalina (por miedo) que se obtiene de la tortura de un niño antes de que su sangre sea recogida.
La pedofilia es un «secreto a voces» que atraviesa todas las sociedades mundanas. Lo que es menos conocido es que la pedofilia es solo la parte inicial: de aquí se pasa a la tortura, a la producción de adrenocromo y a los abusos del rito satánico que incluyen la recolección de fetos y también el consumo de carne de niños inmediatamente después del nacimiento.
Para el investigador, Donald Trump es único entre todos los presidentes por tener en cuenta el flagelo de la trata de personas, a través de dos Órdenes Ejecutivas, emitidas en diciembre de 2017 y en enero de 2020.
¿Por qué esta guerra contra los niños? Los niños siempre han sido abusados. Los sacrificios humanos no son nuevos y la pedofilia tampoco es nueva. Los niños son el futuro de la humanidad, también el 1% por ciento piensa que el 90% de todos los seres humanos deben ser eliminados para que el planeta sea estable. La tierra está en medio de una guerra masiva entre el bien y el mal y el abuso de los niños es la pieza central de esta guerra.
