En el medio de este clima controversial poselectoral norteamericano, una de las constantes que aparece es el uso de la tecnología en el proceso electoral, principalmente, cuán eficaz y cuán certera es. Sin duda, sabemos que es rápida, pero las irregularidades que han emergido, sin antecedentes históricos en la votación americana, hacen surgir varias preocupaciones que están siendo investigadas profundamente en este mismo momento.
Uno de los sistemas en cuestión es Dominion, un nombre sugestivo también y que está bajo serio escrutinio. Dr Shiva Ayyadurai, del MIT (Massachusetts Institute of Technology, una de las universidades más prestigiosas en tecnología en USA), detectó en el sistema una aplicación algorítmica llamada weighted race algorithm, un sistema que separa los votos de acuerdo con la orden que recibe. La gente de Dominion explica que esta característica fue creada para separar los diferentes indicativos de una persona, y se implementó principalmente para medir la densidad de una determinada raza en los complejos habitacionales.
Pero como el Dr Shiva analiza, en todos los estados en que los votos para un mismo candidato aparecen súbitamente, y siendo estos en un 100% para un solo candidato, cosa que es estadísticamente imposible, usan Dominion para procesar los votos. Para que se hagan una idea, aparecen votos y desaparecen votos (por ejemplo, en Virginia, en un minuto, 373 mil votos desaparecieron “mágicamente”) como si estuviéramos en una máquina de Arcade o alguien estuviera jugando a la carambola con los votos. En las mismas investigaciones se ha encontrado que en algunos estados los votos sobrepasan el 100% de la gente registrada para votar (como el voto no es obligatorio, uno se tiene que registrar para votar), entonces la votación fue tan fantástica que el 110% votó esta vez, es decir, más gente que la registrada. Totalmente ilegal.
Otra irregularidad al mejor estilo tercermundista: ¡los muertos también votan! Actualmente están verificando que todos los que han votado pertenezcan a la tierra de los vivos porque parece que algunos espíritus se han colado cumpliendo con su responsabilidad ciudadana.
Se sospecha que Dominion programó el sistema operativo de las máquinas de votos para que use números decimales (cuenta votos como dinero, y eso también produce un efecto en el resultado final, llamado Fraction Magic, donde un voto no vale uno) y para tener acceso remoto (WebEx) a través de un sistema de interfaz.
De esta forma se pueden controlar los resultados como un juego de mesa, dónde agregar o sustraer según el intento. Se han encontrado votos contados en países tan remotos como España, tema de otro artículo, y eso es contra la ley electoral que no permite interferencia extranjera en ningún proceso electoral y menos que los votos sean contados en otro país, aunque sea hecho por máquinas.
Otra de las cosas que han sido investigadas son las cámaras de seguridad que muestran cómo personas se han acercado a las computadoras que han sido “selladas” la noche anterior. Se suma a eso testimonios de supervisores electorales que no se les ha permitido acceder a los servidores. Hay filmaciones de personas llevándose computadoras de la oficina electoral, cosa prohibida. Revisando la historia de cada una de estas computadoras se ve que se han cambiado configuraciones un par de semanas antes del 3 de noviembre.
Por lo tanto, más allá de que los que pierden sientan la tentación de decir que perdieron por fraude, hay cosas concretas y hechos que no pueden suceder en una votación seria, y que están siendo investigados profundamente, porque acá no está en juego quién ganó, sino la veracidad de todo el sistema, porque si los ciudadanos americanos ven que cualquiera puede hacer trampa y gana el que mejor hace trampa, la conclusión va a ser que votar es una charada y que el sistema democrático es eso mismo, una charada; y cuando se termina la confianza de la gente en un sistema, se acaba el sistema en el sentido de que deja de ser eficaz, como tantos ejemplos encontramos en la historia.
Bennie Smith explica como pasa en detalle en BlackBoxVoting.org HackingDemocracy.com
