Resumiendo, estos dos conglomerados de inversión Vanguard y BlackRock son controlados por las familias mas ricas del mundo, algunas de estas familias son de la realeza y otros ricos desde antes de la era industrial. Oxfam y Bloomberg acunaron el termino 1% del mundo, estos son los que tienen todo el dinero del planeta, y el total es más que todo el dinero combinado del resto 99%. Los dos nombres que aparecen mas en los informes de inversores y en sus reuniones son Rothschild Investment Corp. y Edmond De Rothschild Holdings, también están entre otras familias importantes, la familia Orsini, la familia americana Bush, la familia de la realeza británica, la familia Du Pont, los Morgan, los Vanderbilt y los Rockefeller. Un ejemplo, en el informe de los 10 dueños de Pfizer figuran en orden de cantidad, de más a menos, The Vanguard Group, SSgA Funds Management, BlackRock fund advisers, Wellington Management, Capital research and management y hasta que llegamos al puesto 10, ¡sorpresa! Charles Schwab Investments, el que quiere reciclar al mundo porque según las cosas están muy mal con este modelo económico. ¿Habrá que preguntarse cuál es la agenda de uno de los hombres más poderosos del mundo, será por amor a la humanidad?
Otra conexión es la de BlackRock con la reserva federal americana que es una entidad privada a pesar de su nombre y los bancos prestamistas americanos y mundiales. No solo les presta dinero a estos bancos, sino que se ocupa de proveer la tecnología de software para su funcionamiento, también están dentro del espectro de Vanguard y BlackRock los sospechosos de siempre, Microsoft, Amazon, Facebook, Apple, Alphabet Inc., etc.
Nos percatamos entonces de la conexión entre el gran reinicio mundial propuesto desde el poder o por el 1% y la influencia de estas familias. Por ejemplo, cuando Lynn Forester de Rothschild propuso que los Estados Unidos tendría que ser un país de un solo partido, como China, y no quiere que leyes que exigen presentar una identificación para votar pasen, ¿qué es lo que ella hace? Llama a conferencia a los CEOs de las compañías top 100 y les dice que públicamente pregonen la oposición a cualquier ley de anticorrupción y les ordena boicotear el estado de Georgia que quiere pasar esa ley de identificación para votar, como lo experimentamos cuando Coca Cola y la liga mayor de futbol americano y hasta la celebridad de Hollywood Will Smith abogaron en contra de esa ley. Así es como operan las elites.
Ahora Klaus Schwab quiere terminar con la pobreza, el hambre, la polución y las enfermedades para el 2030, si leyeron bien, o sea en menos de 9 años, si ustedes lo creen allá ustedes, pero para lograr eso los países tienen que ceder sus soberanías a un poder mundial centralizado, ¿que en este caso sería la ONU y por qué debe ser así? Primero porque para lograr todo eso se necesita dinero, dinero que no va a venir de ellos, más bien ellos lo van a administrar e imponer sus ideologías en el camino y ¿de dónde viene el dinero de los países? Si, de las riquezas y recursos de los países, no de nosotros ya que para ese entonces “no vamos a tener nada y seremos felices” como el slogan del Foro Económico Mundial lo afirma. Y segundo porque es obvio que los países han demostrado que no están preparados para afrontar crisis globales, y acá viene, “como bien se ha demostrado en este ultimo ano ante la pandemia COVID”, sus palabras. Y acá finalmente llegamos al meollo de la cuestión.
¿Fue la pandemia de Covid19 orquestada para justificar la necesidad de un poder global centralizado o precipitarlo?
