Con cien cañones por banda, viento en popa a toda vela, / no merma ya, sino crece, el “Expediente Royuela”. / Es la vergüenza de España, no una deshonra cualquiera, / denuncia una mafia en el Gobierno y que callan los de fuera. / España sufre un secuestro de esa camorra fullera, / toda la oposición lo calla y ninguno la desvela.
Cada episodio del Expediente Royuela supera al anterior. Y en vistas de que se nos acabaron todos los superlativos para describirlos hemos tenido que recurrir al pregón, teniendo en cuenta que este es un anuncio o aviso oficial de una noticia o un hecho que se hace en voz alta por la calle.
No tiene justificación ninguna el silencio de la judicatura ante las insistentes denuncias de la familia Royuela. Hechos tan graves que afectan a buena parte de la cúpula del PSOE (porque no se trata de simple corrupción, sino de crimen organizado) porque, como siempre decimos, aquí alguien delinque: o los Royuela difamando a miembros de la cúpula del PSOE, o esos miembros por llevar a cabo los crímenes que denuncian los Royuela. En cualquiera de los dos casos la Justicia tendría que haber actuado YA. Y no solo eso, es muy extraño que los afectados no intenten limpiar su imagen. También tienen responsabilidad el resto de partidos de la oposición por no hacer nada para que este entuerto se aclare.
En el anterior artículo se denunciaba públicamente la relación de Zapatero con la logia de Florida. Este (según el expediente) se encargaba de recoger las remesas de dinero que provenían de varias logias europeas y de varias comunidades judías españolas para entregarlas en Miami. Esto incriminaba a Zapatero con la mafia de Mena, pero a niveles de corrupción. En el último capítulo el bombazo es que Zapatero pasa de ejecutar una delincuencia “limpia” (no se mezcla con delitos de sangre), podríamos decir, a una delincuencia de sangre, es decir, que se involucra en la muerte de personas o asesinatos.
En diversas entregas del expediente, Zapatero ayuda a la mafia de Mena, y a él mismo, a zafarse de la Justicia a través de la masonería. Pero en el episodio que relatamos hoy se ve claramente mezclado en temas de asesinato. En primera instancia, el exfiscal avisa a Zapatero que cancele ciertas cuentas que tiene en Maracaibo porque corre el riesgo de que los Royuela las descubran. Pero más tarde nos cuenta cómo lleva a cabo asesinatos encargados por el mismo expresidente. Dice así Mena en la última entrega:
Carta/nota del exfiscal José María Mena al expresidente José Luis Rodríguez Zapatero.
A la atención de José Luis Rodríguez Zapatero. Asunto: eliminación física de Johm a Wittard. Ciudadano de USA.
Le comunico que en el día de ayer se procedió a la eliminación física del individuo de referencia, operación encargada por la organización a través de usted. No se produjeron incidencias que destacar.
En otra nota dirigida al expresidente le narra lo siguiente:
Siguiendo sus órdenes, por encargo de Patrick Mcdowell le comunico que con fecha de ayer se procedió a la eliminación física del ciudadano estadounidense Edwar Colbi, sin que durante la operación se produjeran circunstancias que pudieran enturbiarla.
En un país normal bastaría que esta información llegase a la Justicia sin necesidad de denuncia, para que la misma se encargara, de oficio, de investigarla, ya fuese para inculpar a los Royuela por delitos de difamación o calumnia, o bien, para terminar inculpando (en este caso) a José Luis Rodríguez Zapatero. No tiene nombre que existan más de 200 vídeos en YouTube denunciando todo esto y que no pase nada. Más surrealista es aun que, con las denuncias interpuestas por la familia Royuela a día de hoy, no se haya admitido a trámite ninguna. Y dando un triple salto mortal de surrealismo, lo que espanta ya es que ningún implicado se haya molestado en denunciar estos hechos. Esto es una vergüenza nacional para todos, no solo para los implicados en este asunto.
Terminamos este artículo con otro pregón, con la intención de hacerlo más llamativo. Porque el que escribe no sabe ya qué hacer para llamar la atención de las autoridades en este asunto:
Con cien cañones por banda y doscientos pistoleros; / con la ayuda de una logia y del mismo Zapatero, / un exfiscal del Estado, uno con mucho dinero, / ha construido una mafia que mata con desenfreno. / Será verdad o mentira, será calumnia o certero. / Será lo que tenga que ser, pero hay que juzgarlo primero.
