UN ADIÓS AL 2022

Publicado en diciembre 29, 2022, 9:34 am

Mi jefe de prensa me pidió escribir un editorial para despedir el año. En otras circunstancias hubiera sido una tarea relativamente fácil, pero después de todo lo que hemos vivido como humanidad no es tan sencillo.

La experiencia de la “pandemia” ha abierto dudas que son como brechas en nuestros corazones, y una cierta incertidumbre se ha apoderado de nosotros, de lo que nos dijeron, de lo que ocultaron, del futuro.

[…] Y la palabra era Dios y todas las cosas fueron hechas por Él, y sin Él no existía nada, en Él estaba la vida y la vida era la luz de los hombres, y la luz brilla en la oscuridad, pero la oscuridad no la comprendía…” Así es como el evangelista San Juan explica con sus palabras quién es el Creador, y la última parte es la que me da más esperanza porque la oscuridad ciertamente no entiende a la Luz.

Los poderes, ya sean los gobernantes, o las corporaciones, o las familias más ricas del planeta no entienden a la luz, y aunque ganen batallas y se crean dioses que pueden controlarnos, van a caer como caen todos los imperios porque Logos (Dios-palabra) actúa en la historia humana.

Por eso no me convencen la aparente nobleza de organizaciones que “pretenden” salvar al mundo ni tampoco sus planes, porque la fabricación de armas de estos países que parecen regirnos a todos no ha cesado, más bien se ha extendido a otras áreas, como las guerras biológicas (como la que se “escapó”, este virus modificado y por qué lo modificaron). ¿Quién es el enemigo ahora? No es difícil de imaginar, después de todo el mismo Bill Gates proclama a cuatro vientos que “..tenemos que bajar la población a quinientos millones”.

Nos tenemos que preguntar quién nos odia tanto.  Ya nos advertía San Pablo: No luchamos en contra de seres de carne sino contra los espíritus de las tinieblas, es decir, nuestra lucha es espiritual. Un famoso anarquista una vez dijo que la lucha de los poderosos era por conquistar el espacio que está entre nuestras orejas, una lucha intelectual, entonces añadida a una lucha por nuestros cuerpos también, pues dejamos que experimenten con nosotros, ¿o no? To be or not to be, no es una opcion, siempre somos desde que somos concebidos.

En Argentina el año terminó con un campeonato mundial, cuatro millones de personas solo en el Obelisco de Buenos Aires, una alegría tan anhelada. Al ver a tanta gente unida me puse a pensar por qué los poderes invierten tanto en tenernos divididos. ¿Se imaginan si millones se juntaran para meter a los corruptos en la cárcel o enjuiciarlos en el momento?

La eterna lucha entre el Mal y el Bien está a toda máquina, sin descanso. La complacencia no nos llevará a nada. La sultana Aixa en su momento dijo a su hijo tras perder Granada: “Llora como niño lo que no supiste defender como hombre”, pero llorar no es el camino.

Mis deseos para este nuevo año y para el futuro inmediato es ser más inteligentes y valerosos, estar más alerta, hacer más preguntas y actuar con precaución y, más que nada, no seguir a dioses con pies de barro, sino más bien dejarnos abrazar por el Dios omnipresente, el que nunca falla en sus promesas.

 “[…] Esa fue la verdadera Luz que vino al mundo y que ilumina a cada hombre. Él estaba en el mundo y el mundo fue hecho por Él y el mundo no lo conocía. Y el verbo se hizo carne y está entre nosotros”…..

Para nosotros, el tiempo de las cortesías se ha acabado; o aceptamos el mal o lo exponemos; o protegemos a los niños y jóvenes, o los dejamos a la merced de los lobos hambrientos; o compramos las mentiras de los poderosos, o exponemos sus engaños. No hay tiempo para la indecisión ni las medias tintas. Los seres humanos valemos la pena porque somos sagrados como así lo son nuestras vidas porque nuestras almas provienen de Dios, y Dios está en el mundo con nosotros, y los poderes de las tinieblas no imperarán porque la oscuridad no entiende a la Luz.

Corresponsal de Estados Unidos.

Corresponsal de Estados Unidos

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